Receta de anchoas a la cazuela
Contenido
- 1 ¿Por qué deberías probarlas?
- 2 Ingredientes para preparar anchoas a la cazuela
- 3 Cómo hacer anchoas a la cazuela paso a paso
- 3.1 1. Limpia las anchoas y retira las espinas si es necesario
- 3.2 2. Pela y corta ajo y cebolla en láminas
- 3.3 3. Sofríe el ajo y la cebolla en una cazuela con aceite de oliva
- 3.4 4. Añade las anchoas y cocina a fuego medio unos minutos
- 3.5 5. Agrega vino blanco o caldo y deja reducir
- 3.6 6. Espolvorea perejil fresco y sirve caliente
- 4 Variantes de anchoas a la cazuela con tomate, pimientos u otras verduras
- 5 Consejos para acompañar y servir anchoas a la cazuela
La receta de anchoas a la cazuela retrotrae a la calidez del hogar, al sabor de siempre y al buen comer, tanto por lo rico como por el aporte nutricional. Es pescado azul con verduras, ¿qué puede fallar?
Hay una ventaja más: lo fácil y lo rápido que se prepara. No hace falta estar curtido en el noble arte de los fogones para que te salga un plato capaz de sorprender. Así que, si quieres regalarte tiempo y sabor a ti mismo o a algún ser querido, ¡apunta!
¿Por qué deberías probarlas?
Cocinar a la cazuela es una forma de conservar la jugosidad del pescado, ya que el calor es uniforme y el punto de humedad se mantiene equilibrado. Te va a gustar su sabor y su aroma, más aún si cuidas el fondo del plato entre el sofrito y la reducción de vino.
Pero, además de gustarte, te va a saciar y te va a aportar todas sus propiedades: ácidos grasos omega 3, proteínas, vitaminas y minerales. Además, son muy pocas calorías.
Ingredientes para preparar anchoas a la cazuela
Estos son las cantidades aproximadas para una receta para 2 personas:
- Unos 300 g de anchoas frescas o bocartes. También puedes utilizar anchoas en conserva.
- 2 dientes de ajo.
- ½ cebolla.
- Un chorro de aceite de oliva virgen extra.
- 50 ml de vino blanco caldo de pescado suave.
- Un poco de sal y pimienta.
- Un manojo de perejil fresco.
Cómo hacer anchoas a la cazuela paso a paso
Si tienes todos los ingredientes a tu alcance, en solo media hora puedes completar esta exquisita receta.
1. Limpia las anchoas y retira las espinas si es necesario
Si compras las anchoas frescas, puedes pedir en la pescadería que retiren las cabezas, las vísceras y, si quieres, también la espina. Si tienes que hacerlo tú, los pasos son sencillos:
- Sujeta el bocarte con una mano y, con la otra, pellizca la cabeza con firmeza y tira de ella hacia atrás, para que las vísceras salgan con ella.
- Con un cuchillo pequeño o unas tijeras aptas para pescado, abre el pescado en la zona del vientre para terminar de retirar las vísceras con los dedos.
- Si quieres, puedes retirar también la espina. Para ello, puedes introducir el dedo o un pequeño cuchillo por debajo de la misma y deslizarlo hacia la cola, para que se despegue por completo sin dificultad.
- Si quieres, puedes retirar también la cola, cortándola con un cuchillo o las tijeras.
- Sumerge los filetes de bocarte en agua fría para eliminar restos.
- Escurre los bocartes y deposítalos en una bandeja o plato con papel de cocina para secarlos bien antes de cocinar.
Si utilizas anchoas en conserva, solo tendrás que sacarlas y enjuagarlas o escurrirlas, dependiendo del aceite que quieras conservar.
2. Pela y corta ajo y cebolla en láminas
Puedes cortar el ajo en láminas finas y la cebolla en juliana, así se cocinarán bien y liberarán todo su jugo y aromas.
3. Sofríe el ajo y la cebolla en una cazuela con aceite de oliva
Pon un chorrito de aceite de oliva virgen extra en una cazuela de barro y pocha el ajo y la cebolla a fuego medio, con cuidado de que no se quemen. ¡Esta es la base de tu plazo!
4. Añade las anchoas y cocina a fuego medio unos minutos
Coloca las anchoas en la cazuela, distribuyéndolas bien, y sazona con sal y pimienta. No necesitan mucho tiempo de cocción, solo 3 o 4 minutos. Puedes darles la vuelta en mitad del proceso para que se hagan mejor, pero es importante no pasarte para que no se endurezcan y acaben perdiendo su textura jugosa.
5. Agrega vino blanco o caldo y deja reducir
Agrega el vino o el caldo según tu gusto y lo que tengas en casa. El vino aporta cierta acidez, según el que escojas, mientras que el caldo puede agregar sabor a mar. Déjalo reducir hasta que te quede una salsa algo espesa.
Un consejo: si quieres unas exquisitas anchoas a la cazuela con pimentón, puedes agregarlo junto al vino o caldo.
6. Espolvorea perejil fresco y sirve caliente
Una vez que el líquido haya reducido, apaga el fogón. Pica el manojo de perejil fresco y espolvorea antes de servir. Darás color y frescura al plato.

recetas de anchoas a la cazuela
Variantes de anchoas a la cazuela con tomate, pimientos u otras verduras
Te hemos explicado el paso a paso de la receta básica, pero hay otras variables que puedes utilizar si tienes un poquito más de tiempo, ganas de innovar o quieres agregar sabor:
Tomate triturado. Puedes prepararlo tú mismo o comprarlo ya envasado si quieres ahorrar tiempo, pero agregará densidad a la salsa y el punto de acidez propio del tomate. Con 3 o 4 cucharadas soperas y 5 minutos de cocción es suficiente.
Pimientos verdes o rojos. Puedes cortar tiras y sofreírlas junto a la cebolla y el ajo. Agregará un punto de dulzor que cambia los matices de su plato.
Patatas. El pescado con patatas es un clásico que gusta a todos los públicos, y hace que el plato quede más completo en cuanto a macronutrientes. Puedes pelar una, cortarla en rodajas finas y ponerlas en el fondo de la cazuela, ligeramente fritas previamente para asegurarte de que te quedan tiernas.
Consejos para acompañar y servir anchoas a la cazuela
Si has optado por la receta básica, necesitarás una buena hogaza de pan crujiente para mojar. ¡Esa salsa no puede quedarse ahí! O, si lo prefieres, puedes agregar un poquito de arroz blanco a modo de guarnición. Por otra parte, si quieres agregar vegetales, pero no necesariamente cocinar más, puedes acompañar las anchoas con pimientos asados aliñados.
En cuanto a la presentación, una idea es disponer las anchoas de manera circular, juntando unas con otras de manera que se toquen con la cola en el centro. En medio puedes poner un poco de perejil para adornar y aportar color.
Para completar la experiencia, nada mejor que complementar con una bebida que maride con la propuesta. Un vino blanco con buen nivel de acidez y con matices afrutados puede realizar el sabor del plato.
Tu receta de anchoas a la cazuela puede convertirse en un plato sencillo y rápido para el día a día o en un “platazo” con el que sorprender a la familia o los amigos. La diferencia está en la creatividad y en el empeño que pones, pero también en la selección de producto. ¡Elige bien siempre!




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